Me tiré con un pincel hacia el papel y puse escape

Los poemas tendrán vida y el solista te los vendrá a contar.

lunes, 3 de enero de 2011

Terapias mal llevadas sin nadie que mediara por dos histéricos. (1999, LOL)


Y con sentarnos frente a frente lo habríamos solucionado. Ese miedo que nos paraliza nos lo impidió. Y yo, cegada ante todo me creí madura e incomprendida, cuando la primera niña era yo. No es justo. No fui justa. ¿Y ahora qué? Ahora nada.

Por vergüenza, dejé de ser. Me creí sentir fuerte, cuando realmente no lo era. Me disfracé de adulta. Pero yo era la más insegura del mundo. De nuestro mundo. Y te culpo a ti, siempre, todos los días desde entonces, sabiendo que en el fondo la culpa es totalmente compartida. No supe luchar. Pero es que tú tampoco supiste. Y eres tú. Lo peor de todo, es que se que eres tú. Tú y no otro. Solo tú.

Y me ahogué en la opinión, en la opinión que nadie decía y que muchos pensaban, y yo, yo lo sabía, y no lo pude pasar por alto. Lo siento, no pude.

Acércate a mí y pregúntame. Háblame como nunca lo hiciste, y te contestaré como siempre intenté hacer. Y, ¿por qué no te quedaste aquel día? Eso me dijo tanto… me dijo demasiado. Quizás lo suficiente. Yo intenté rectificar pero no me dejaste. Y después, después te esperé. Aún así, te esperé, estuve allí, por ti, pero tu no.
Y el tiempo ha pasado desde mi error. El año ha pasado y yo sigo aquí, en la misma página de un libro que hace tiempo dejó de cobrar sentido. Y yo, empeñada en recuperar hasta la última línea de aquel capítulo que ya acabó.

Pero… ¡Quien me ha visto y quién me ve! … la dueña de lo real, de lo práctico, de lo lógico…. Está bien, me aplico el cuento.

Esta vez, me lo digo yo.




Free CursorsMyspace LayoutsMyspace Comments